Como guitarrista de metal, ¿alguna vez has considerado adoptar elementos del rock para mejorar tu sonido y habilidades? En este artículo, exploraremos estrategias y consejos de rock que pueden ayudarte a llevar tu guitarra de metal al siguiente nivel. Si estás listo para aprender y experimentar, este artículo es para ti.
Cómo se aplica el rock al metal
Aunque a priori no pueda parecerlo, hay muchos elementos del rock se pueden usar para tocar el metal. Vamos a hablar de algunos fallos que cometemos los guitarristas de metal (yo incluido) y que tenemos que evitar a toda costa para sonar bien.
Te voy a dejar por aquí una lección con 10 riffs de guitarra heavy metal muy fáciles para que lo aprendas.
La Estructura de los Riffs: Una perspectiva desde el Rock
Al tocar metal, a menudo nos encontramos complicando riffs para intentar alcanzar la máxima potencia y dificultad. Sin embargo, esto puede resultar en una pérdida de sonoridad en nuestras canciones al añadir más instrumentos. Por otro lado, los riffs de rock tienden a ser más simples, lo que permite añadir otros elementos sin crear tanto ruido de fondo. Entonces, ¿por qué no aprovechar este enfoque en tu música de metal? Experimenta con la simplicidad de los riffs de rock y descubrirás un nuevo espacio sonoro en tus canciones.
El Arte de los Solos de Guitarra: Velocidad vs Feeling
Es común que al realizar solos de guitarra en metal, nos concentremos en la velocidad y la técnica, olvidando el «feeling». Pero recordemos que la profundidad y la emoción de un solo puede ser más impactante que la velocidad. Incorporar vibratos y bendings puede darle a tu solo una pausa, permitiendo al oyente disfrutar y «respirar». Invita, con tu música, al oyente a sentirla, a experimentarla con la misma intensidad con la que la tocas.
El Concepto de Fraseo
Del mismo modo, en metal, a menudo llenamos cada parte de la canción con notas sin pensar en el concepto de fraseo. En el rock, las melodías suelen tener un principio y un final, lo que las hace más memorables. Es importante que reflexionemos sobre qué queremos comunicar con nuestras melodías y les demos un sentido de inicio y finalización. Este concepto de fraseo puede hacer que nuestras canciones sean más impactantes y conmovedoras para el oyente.
Recordemos que el aprendizaje musical es un intercambio constante. Tomar prestados elementos de diferentes géneros puede ayudarnos a explorar nuevos horizontes sonoros y a mejorar nuestras habilidades. Entonces, ¿por qué no atreverse a mezclar un poco de rock en tu metal?